En el desarrollo de su actividad, toda Pyme se encuentra con diferentes retos que debe abordar y superar favorablemente para lograr sus objetivos comerciales. Cualquier intento de mejorar la productividad, rentabilidad, competitividad o el desarrollo estratégico del negocio demanda una actitud proactiva pero, también, recursos de financiamiento.

 

En este último punto, es usual que las pequeñas y medianas empresas se encuentren con dificultades para acceder a préstamos bancarios y deban optar por otras formas de financiación. Formas, en efecto, que se ajusten no solo a los montos requeridos por la empresa sino también a sus posibilidades de negociación y estén, asimismo, disponibles en un período de tiempo relativamente corto.

¿Cuándo necesita financiamiento una Pyme?

Los momentos y razones por los que una Pyme requiere de financiamiento pueden ser muy variados y dependen en gran medida de las características y necesidades particulares de cada negocio.

 

Actualmente, hay al menos tres grandes razones que llevan a los dueños de Pymes a buscar apoyo financiero:

1) Necesidad de digitalización

Hoy, para incrementar sus niveles de productividad, todo negocio debe contar con recursos tecnológicos de automatización. Estos no solo contribuyen a reducir los costos y tiempos de trabajo dedicados, también permiten optimizar el rendimiento y alcanzar mejores resultados.

 

Ahora bien, la implementación de sistemas de gestión, por ejemplo, suele exigir a la Pyme una importante inversión para la que no dispone de presupuesto dedicado: pago de licencias, soporte, equipos, etc.

2) Expansión

Para muchas Pymes, la expansión del negocio suele ser una posibilidad de alcanzar escalabilidad y aumentar sus niveles de facturación. Ello, no obstante, exige también una significativa inversión, tanto estructural como de capital humano. 

 

Lo mismo ocurre cuando se trata de comprar nueva mercadería, lanzar un nuevo producto o brindar un servicio más amplio y completo.

3) Atracción de talento

La atracción y retención del talento es uno de los mayores desafíos que deben poder sortear las pequeñas y medianas empresas. Esto implica, en muchas ocasiones, transformar sus procesos y diversificar los beneficios de contratación.

 

En el creciente contexto del home office, por ejemplo, garantizar al empleado los recursos y condiciones para que puedan desarrollar correctamente su trabajo exige la compra y actualización de equipos y sistemas de comunicación, con los que sea factible la integración de los procesos de trabajo.

¿Cuál es la mejor alternativa de financiamiento para una Pyme?

Actualmente, la alternativa ideal de financiamiento para Pymes son los préstamos con cheques personales. Estos consisten en créditos comerciales especialmente dirigidos a dueños de Pyme, con el fin de potenciar su proyecto productivo e impulsar su desarrollo.

 

Los préstamos con cheques se distinguen de otros tipos de créditos por ser una forma simple, rápida y segura de financiamiento. Contribuyen al incremento de la competitividad del negocio, al tiempo que ofrecen grandes condiciones de negociación y bajas tasas de interés.

 

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